Disponer de espacio y tiempo es
vital para poder distinguir lo importante de lo que no lo es. Lamentablemente,
en la actualidad vivimos demasiado ocupados para reflexionar, muchas cosas
pasan a nuestro alrededor que apenas si logramos percibirlas, incluso, muchas
veces las omitimos. Vivimos en un estado confuso en el que lo vital y lo
trivial aparentemente juegan un papel muy similar. Pero las cosas no funcionan
así, pues hay cosas que agregan más valor que otras, a menos que sigamos
haciendo lo mismo. Esta transición solamente se puede lograr si se realiza
deliberadamente un cambio de perspectiva con planeación. Es decir, tienes
opciones, tomas decisiones, haces un plan y lo ejecutas intencionalmente para
ir hacia donde deseas. Ya sé que suena simple, pero hay que ser muy intencional
para lograrlo.
La claridad se obtiene al darnos
espacio para observar, escuchar y pensar, así ser conscientes de las
posibilidades que tenemos para tomar decisiones, enfocarnos y concentrarnos en
nuestras elecciones. Si elegimos de manera adecuada, nos daremos cuenta de que
sólo es necesario poner el foco sobre unas pocas cosas. Y esto lo logramos
deliberadamente al hacer una pausa y dar un paso hacia atrás para reflexionar.
Simplemente esto nos permite ver las opciones con mayor claridad, enfocarnos y
concentrarnos sólo en lo más importante. Depuramos nuestra visión haciendo a un
lado lo trivial, todo aquello que es innecesario, que aporta poco o nulo valor
a nuestros objetivos y que sólo nos distrae, mermando nuestra capacidad de
concentración. La clave para crear valor en todo lo que hacemos es encontrar lo
que realmente importa, desarrollar una visión amplia y al mismo
tiempo simplificada para dejar de enfocarnos en los detalles menores y
sólo enfocarnos en los puntos realmente importantes.
Observar, escuchar y pensar son
tres factores importantes para poder encontrar el meollo de las cosas, para
poder ver ese pequeño porcentaje que concentra la mayor parte del resultado que
buscamos. El punto es aprender a usar el increíble efecto que se encuentra en
tan sólo unos cuantos elementos. Cuando puedes ver una situación con claridad,
es mucho más fácil identificar los factores vitales que te lleven a tomar esas
decisiones que sirven para enriquecer tu vida, porque lo que terminas empujando
está en la dirección correcta y con la energía NECESARIA centrada únicamente en
las causas de mayor valor. Esto nos permite crear una visión llena de nuevas y
mejores ideas continuamente, al mismo tiempo que creamos nuevas ideas y
soluciones a partir de las viejas (una especie de impulso constante momentum).
Pues la creatividad, las ideas, la toma de decisiones y la resolución de
problemas son habilidades básicas de todo líder minimalista.
L.Mn.